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Carta anual de Larry Fink

BlackRock pone el cambio climático en el eje de su estrategia

BlackRock, el mayor gestor de fondos de inversión del planeta, ha establecido como centro de su estrategia la lucha contra el cambio climático. Así se expone en la esperada carta anual que su presidente y fundador, Larry Fink, dirige a los CEO, a quienes advierte de que el fondo votará en contra de la continuidad de directivos de empresas que no sean transparentes en materia de sostenibilidad.

Larry Fink, presidente de BlackRock
Larry Fink, presidente de BlackRock

En su carta, considerada cada año como la 'brújula' que señala la tendencia en el sector inversor mundial, el fundador de BlackRock establece la lucha contra el cambio climático como el eje central de la estrategia de inversión de la entidad, que asegura dejará de invertir en proyectos que presenten elevados riesgos de sostenibilidad y votará en contra de las propuestas de los consejos de empresas que no avancen en prácticas medioambientales y en la divulgación de información sobre sostenibilidad.

"El cambio climático se ha convertido en un factor decisivo en las proyecciones a largo plazo de las compañías", escribe Fink

"El cambio climático se ha convertido en un factor decisivo en las proyecciones a largo plazo de las compañías. En septiembre pasado, cuando millones de personas salieron a las calles para protestar contra el cambio climático, muchos enfatizaron el impacto significativo y duradero que tendrá en el crecimiento económico y en la prosperidad – un riesgo que, a la fecha, los mercados han sido lentos en reflejar. Pero la concientización está cambiando muy rápido, y yo creo que estamos al borde de un cambio estructural de las finanzas", escribe Fink. 

"En vista del trabajo que ya hemos realizado en materia de implicación sobre la presentación de información y los crecientes riesgos de inversión en torno a la sostenibilidad, estaremos cada vez más dispuestos a votar en contra del equipo directivo y los miembros del consejo cuando las empresas no progresen lo suficiente en la divulgación de información sobre sostenibilidad y en las prácticas empresariales y planes subyacente", advierte.

Fink asegura que, cada vez más, los inversionistas reconocen que el riesgo climático es un riesgo de inversión y uno de los temas principales que preocupan a los clientes de BlackRock en todo el mundo. Por ello cree que, en los próximos años, "una de las cuestiones más importantes que nos plantearemos será la envergadura y el alcance de las acciones gubernamentales frente al cambio climático, que, en términos generales, definirán el ritmo al que avanzaremos hacia una economía baja en carbono".

Si bien Fink reconoce que esta transición ecológica  deben liderarla los Gobiernos, alineados en torno al Acuerdo de París, "los inversores y las compañías también han de desempeñar un importante papel".