
Varias organizaciones ambientales han presentado una demanda contra la administración de Donald Trump por permitir la extracción de petróleo y gas en el Golfo de México sin una evaluación ambiental adecuada. Según los demandantes, estas actividades ponen en grave peligro a especies marinas en peligro de extinción, como el rorcual de Rice, del que quedan menos de 100 ejemplares vivos, y varias especies de tortugas marinas.
El Servicio Nacional de Pesca Marina de EE.UU. aprobó un dictamen biológico que, según los ecologistas, no cumple con los requisitos legales para proteger la biodiversidad marina.
Entre los riesgos señalados se encuentran las colisiones con embarcaciones, la contaminación acústica y química, los derrames de petróleo y la pérdida de hábitats críticos. Las tortugas marinas afectadas incluyen la tortuga lora, con unas 7.000 hembras anidadoras activas; la tortuga carey, con menos de 25.000 hembras anidadoras en todo el mundo; la tortuga verde, cuya población está en declive en la región; y la tortuga boba, vulnerable a nivel global pero en peligro en el Atlántico occidental. Estas especies dependen de un ecosistema marino saludable para sobrevivir, y cualquier alteración significativa puede tener consecuencias irreversibles.
Según los ecologistas, no se cumple con los requisitos legales para proteger la biodiversidad marina
El rorcual de Rice, una especie de ballena descubierta recientemente como distinta del rorcual de Bryde, es endémico del Golfo de México y se encuentra en una situación crítica. Su población extremadamente reducida lo convierte en una de las especies de ballenas más amenazadas del planeta. Las colisiones con embarcaciones y la contaminación acústica derivada de las actividades sísmicas de exploración petrolera representan amenazas directas para su supervivencia.
Las organizaciones demandantes, entre ellas Earthjustice, Sierra Club y el Centro para la Diversidad Biológica, denuncian que estas políticas favorecen a las grandes petroleras a costa del medio ambiente. Alegan que el dictamen biológico aprobado por el gobierno no solo ignora los riesgos conocidos, sino que también incumple una orden judicial previa que exigía una nueva evaluación ambiental. La demanda busca la suspensión inmediata de las actividades hasta que se cumplan los requisitos legales de protección ambiental.
Comunidades costeras
Además del impacto sobre la fauna marina, los expertos advierten que estas actividades también afectan a las comunidades costeras que dependen de la pesca y el turismo sostenible. La salud del ecosistema del Golfo de México es vital para la economía local y para la resiliencia frente al cambio climático. La falta de una gestión responsable podría agravar aún más la pérdida de biodiversidad y aumentar la vulnerabilidad de la región ante desastres ecológicos.
Medidas controvertidas
Desde su regreso al poder en 2025, Donald Trump ha impulsado una serie de medidas que han generado gran preocupación entre científicos, ambientalistas y organizaciones internacionales. Entre las principales acciones contra el medio ambiente destacan:
Eliminación de subsidios a energías limpias: Trump ha recortado drásticamente los fondos federales destinados a la transición energética, afectando a empresas de energía solar, eólica y tecnologías sin huella de carbono. Esto ha provocado la huida de muchas compañías sostenibles de EE.UU., debilitando el liderazgo del país en innovación verde.
Derogación de regulaciones climáticas: El presidente de Estados Unidos ha revertido normas que limitaban las emisiones de gases de efecto invernadero en sectores como el transporte, la industria y la generación eléctrica. Esto incluye la flexibilización de estándares para las empresas petroleras y de gas.
Apoyo a los combustibles fósiles: Trump ha firmado órdenes ejecutivas para favorecer la producción de carbón, petróleo y gas natural, incluso en áreas protegidas. Ha invitado públicamente a trabajadores del carbón a la Casa Blanca como símbolo de su respaldo a esta industria.
Censura y desfinanciación de la ciencia climática: Su administración ha eliminado información sobre cambio climático de sitios web oficiales y ha recortado fondos para investigaciones científicas relacionadas con el medio ambiente.
Salida del Acuerdo de París: Aunque ya lo había hecho en su primer mandato, Trump ha reiterado su rechazo al pacto climático internacional, debilitando los esfuerzos globales para frenar el calentamiento del planeta.
Estas medidas han sido calificadas por expertos como una “guerra contra el medio ambiente” y podrían aumentar significativamente las emisiones de carbono de EE.UU. en los próximos años.