
¿Cómo estáis viviendo desde LG el confinamiento?
Relativamente bien, trabajando más que nunca aunque con peores resultados, lógicamente. Estábamos bien preparados para teletrabajar y el estado de alarma no ha incidido mucho en cuanto a los usos de trabajo, pero los resultados por supuesto se resienten, todas las tiendas están cerradas.
"En los malos momentos sale a relucir la verdadera identidad de las personas"
Muchas empresas están respondiendo a la emergencia con medidas de responsabilidad social. ¿Crees que en una situación tan grave como la que vivimos es cuando hay que demostrar quién es verdaderamente responsable?
Siempre se ha dicho que en los malos momentos sale a relucir la verdadera identidad de las personas y el liderazgo de las organizaciones. Muchísimas empresas, de forma altruista, están aportando su grano de arena para enfrentar esta crisis. Yo creo que en general la respuesta desde el mundo empresarial está siendo increíble y nosotros hemos querido también ser consecuentes con nuestros lemas 'Life's Good' e 'Innovation for a better life', convencidos de que la innovación tiene que ayudar a hacer la vida de las personas mejor, y eso es lo que hemos hecho.
¿Cuáles son las principales acciones sociales puestas en marcha estos días por LG Iberia?
Hemos puesto en marcha muchas iniciativas por voluntad propia y colaboramos con muchas otras que nos han pedido ayuda desde fuera. Hemos aportado unos 500 smartphones para hospitales, con la idea de que se les entregue a los pacientes que están aislados y puedan así contactar con sus familiares. También hemos aportado teléfonos al Ayuntamiento de Las Rozas, donde está nuestra sede corporativa, para chavales que no pueden mantener su ritmo académico por no tener ningún dispositivo para estar conectados con el colegio. También hemos dotado al hospital de Ifema de grandes pantallas de información, hemos repartido televisores de diferentes tamaños en residencias de mayores, porque ahora esas personas están confinadas en sus habitaciones y no pueden estar en los espacios comunes, que es donde ven normalmente la televisión. A la ONG de infancia Save the Children le hemos facilitado ordenadores para el ámbito educativo de niños en situación vulnerable, y nos hemos unido a la iniciativa 'Saldremos Juntos' de los futbolistas Saúl Ñíguez y Morata, para ayudar a personas en riesgo de exclusión. En definitiva, hacemos todo lo que podemos para ayudar.
Desde un compromiso de las empresas con la sociedad, ¿ves este tipo de iniciativas como una obligación en estos momentos?
Sí. Las empresas tienen que aportar no sólo ayuda social, sino también liderazgo. Con esta gran desgracia nos estamos dando cuenta de que tenemos que cambiar muchas cosas, debemos ser mejores. Es justo que las empresas, además de mantener su negocio, aporten a la sociedad y hagan que la vida de las personas que tienen a su alrededor sea mejor. En el año 2017, a raíz de la puesta en marcha del 'Reto Smart Green', me di cuenta de que podíamos influir mucho más de lo que pensábamos y de que no teníamos que esperar a que otros lo hicieran por nosotros.
"En esta situación las empresas tienen que aportar no sólo ayuda social, también liderazgo"
Pues como te digo, trabajando mucho pero de una forma diferente. Yo tengo muchas reuniones cada día, hablo con muchísima gente, y ahora mi interacción es virtual. En este proceso estamos aprendiendo que se puede hacer las cosas de una manera más eficiente, que tal vez no haya que coger tantos aviones para tener reuniones eficaces y que podemos hacer más con menos. Incluso se está demostrando que esta retirada del ser humano está siendo beneficiosa para determinados aspectos del medio ambiente. En mi día a día lo que intento es que la gente esté lo más protegida posible, que todos los sistemas funcionen y mantener la motivación, que es algo esencial. En definitiva, proteger a las personas de las que soy responsable y a la compañía que dirijo.
Una reflexión final: ¿en qué sentido crees que esto nos va a cambiar en el futuro si es que crees que lo hará?
Nos vamos a quitar muchas 'tonterías' de la cabeza, perdón por la expresión. Cosas que no son importantes y que de alguna manera han viciado nuestra vida. Esta crisis nos va a enseñar a cuidar lo que importa. La gente tiene que tener un fondo real, tenemos que ayudarnos, cuidar de las cosas realmente importantes, de nuestro futuro. Los aspectos fundamentales nos unen a todos independientemente de nuestros sentimientos políticos, sociales o religiosos. En lo fundamental todos estamos unidos y ahí están las cosas buenas. Esta desgracia también nos está enseñando que somos más vulnerables de lo que pensábamos, creemos que la ciencia lo puede solucionar todo, que hay una cura para todo, que algunas circunstancias adversas nunca nos van a alcanzar y hemos visto que en un tiempo récord las consecuencias a nivel planetario han sido devastadoras. Esta crisis nos ha bajado a la realidad y espero que eso nos enseñe a cuidar de lo importante en el futuro.