Este anteproyecto forma parte de un paquete de energía y clima al que ha dado luz verde el Consejo de Ministros junto con la Estrategia de Transición Justa. La portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, ha señalado en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que ese paquete es "una combinación de anhelo y realidad" que se alinea con los compromisos adquiridos por España con la UE.
La ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha indicado que el paquete de energía y clima es "ambicioso y equilibrado", y tiene como finalidad "mejorar la calidad de vida de los ciudadanos" y "facilitar la modernización de nuestra economía" al ofrecer oportunidades de negocio y empleos.
El anteproyecto de ley no fructificará en esta legislatura debido a que será sometido a información pública para que las personas o entidades interesadas hagan las aportaciones pertinentes, y tendría que volver a ser aprobado por el Gobierno que salga de las urnas del próximo 28 de abril, iniciándose así su tramitación en el Parlamento.
El anteproyecto de ley tendrá que volver a ser aprobado por el Gobierno que salga de las urnas del próximo 28 de abril
El anteproyecto de ley se marca objetivos a medio y largo plazo. Así, para 2030 la meta es reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en al menos un 20 por ciento con respecto a 1990, generar el 70 por ciento de la electricidad con renovables, asegurar que al menos el 35 por ciento del consumo final de energía proviene de renovables y mejorar la eficiencia energética en al menos un 35 por ciento.
Para 2050, y en línea con la estrategia de descarbonización de la UE, las emisiones de gases de efecto invernadero deberían reducirse al menos un 90 por ciento con respecto a 1990 y el sistema eléctrico tendría que ser ya 100 por cien renovable.
Zonas urbanas de bajas emisiones
El transporte es responsable de más del 26 por ciento de las emisiones causantes del cambio climático en España y del 42,1 por ciento de las de óxidos de nitrógeno, que tienen un efecto muy pernicioso para la salud. El anteproyecto de ley establece el objetivo disponer de un parque de turismos y vehículos comerciales ligeros sin emisiones directas de CO2 en 2050.
Para ello, los turismos y vehículos comerciales ligeros nuevos tendrían que ser de cero emisiones no más tarde de 2040. Ribera ha indicado al respecto que el anteproyecto incluye "la redacción literal" de la estrategia de descarbonización a largo plazo aprobada por la Comisión Europea. "Recogemos palabra por palabra lo que el comisario Cañete propuso al colegio de comisiarios para los vehículos ligeros. Si queremos cumplir con nuestras metas de descarbonización, debemos garantizar que sean de cero gramos de CO2 por kiómetro recorido en el año 2040", ha precisado.
Puesto que casi el 70 por ciento de las emisiones de CO2 se producen en las ciudades, el anteproyecto insta a los municipios de más de 50.000 habitantes a fomentar medidas de lucha contra el cambio climático, como creación de zonas de bajas emisiones no más tarde de 2023; facilitar los desplazamientos a pie, en bicicleta u otros medios de transporte activo, y mejorar el transporte público y su progresiva electrificación.
Para facilitar el despliegue de los nuevos vehículos limpios, las grandes instalaciones de suministro de combustibles y carburantes a vehículos (las de un volumen anual agregado de ventas de gasolina y gasóleo superior o igual a cinco millones de litros en 2018) deberían contar con al menos una infraestructura de recarga eléctrica de potencia igual o superior a 22 kw.