¿Cuál es la principal amenaza para varias especies de loros a nivel mundial?
Una de las principales amenazas es el comercio ilegal de fauna. De hecho, sería la más preocupante junto con la pérdida de hábitat cuando hablamos a nivel de todas las especies. En este estudio hablamos específicamente de las especies presentes en Bolivia, y de la situación del comercio ilegal de estas especies en Bolivia. Lo que vemos en Bolivia es que el comercio ilegal de fauna a nivel internacional, que es una amenaza muy importante para los loros, en este país se ha reducido enormemente.
De hecho, ha disminuido hasta el punto de quedar totalmente eclipsado por el comercio a escala nacional, para suplir la demanda local de mascotas de origen salvaje dentro del propio país. No obstante, a pesar de que esto se podría aplicar también a otros países de Sudamérica, Centroamérica y Caribe, es necesario fijarse en cada caso específico.
¿Qué tasa de extinción enfrentan los loros en comparación con otros grupos de aves?
Una de las más altas. Esto se evidencia en que cerca del 30% de las especies de loros a nivel mundial estén amenazadas. En algunas regiones, como el Neotrópico, este porcentaje es incluso mayor, llegando casi al 40%.
¿Qué aspecto del comercio de loros ha recibido poca atención?
Cuando hablamos de comercio de loros aquí, evidentemente, nos referimos al comercio ilegal. El término comercio engloba tanto al legal como al ilegal. En este artículo destacamos el hecho de que el comercio ilegal ocurre a escalas diferentes, desde internacional a una escala mucho más local.
“El comercio ilegal a escala local representa un problema de conservación para muchas especies”
A menudo se pone el foco sobre el comercio internacional y se olvida que existe ese comercio ilegal a escala más local. Pensemos, por ejemplo, en el comercio de marfil, cuernos de rinoceronte, escamas de pangolín...todos ellos casos de comercio ilegal internacional. Pero, a pesar de recibir mucho menos atención mediática, el comercio ilegal a escala local también puede representar un problema de conservación para muchas especies.
¿Qué impacto tienen las regulaciones internacionales en el comercio ilegal de loros?
Lógicamente, tienen un impacto importante. Por ejemplo, las prohibiciones de Estados Unidos y la Unión Europea de importar animales salvajes para el mercado de mascotas exóticas han propiciado un descenso importantísimo en las capturas en los países de origen que tenían como destino estos mercados. Este es el caso general de Sudamérica, que exportaba gran cantidad de loros de origen salvaje a Estados Unidos y Europa, que ahora han sido reemplazados por ejemplares criados en cautividad en esos propios países, disminuyendo la presión sobre las poblaciones salvajes.
¿Qué metodología novedosa se desarrolló en el estudio?
Este estudio permitió, por primera vez, estimar el volumen de extracción que se podría estar haciendo anualmente en el país, incluyendo también los loros capturados ilegalmente para satisfacer la demanda de loros a nivel local. Me explico. Hasta ahora, casi todos los estudios se centraban en incautaciones por las autoridades o estudios de grandes mercados en ciudades donde se vende fauna habitualmente, que suelen reflejar comercio internacional o hacia grandes urbes. Esto deja fuera de los cálculos todo el volumen capturado que se queda en las zonas de origen, en los lugares de extracción de loros.
“En el estudio estimamos una extracción anual de entre 300.000 y 500.000 individuos, que es totalmente insostenible”
Por ello, además de un estudio de 5 años de seguimiento en el principal mercado de Bolivia, en Santa Cruz, también muestreamos las zonas rurales en las que veíamos que provenían esos loros vendidos allí. Así, y gracias a encuestas con la población rural de esas zonas, sabíamos qué porcentaje de lo que se capturaba allí tenía como destino la ciudad, o se quedaba localmente para satisfacer la demanda de mascotas local.
Eso nos permitió hacer una estima de extracción anual de entre 300.000 y 500.000 individuos, que es totalmente insostenible y evidencia la delicada situación de conservación en la que se encuentran muchas especies de loros en el país.