Ya son más de 70 millones las personas las que se han visto obligadas a abandonar sus hogares, cinco millones de ellas sólo en el último año. Son datos de 'Las personas refugiadas en España y en Europa', informe anual que la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) acaba de hacer público.
CEAR espera del nuevo Gobierno español "valentía" para tomar las medidas necesarias
Según CEAR, "2017 pasará a la historia no solo como el año que la Unión Europea falló clamorosamente a los refugiados con el incumplimiento de los acuerdos de acogida y recibiendo apenas un tercio de las personas comprometidas a través de los programas de reubicación y reasentamiento. Además, se ha utilizado la criminalización de las organizaciones de rescate en el Mediterráneo como cortina de humo para invisibilizar las consecuencias de las política de blindaje de fronteras de la UE".
Por ello, la organización espera del nuevo Gobierno español "valentía" para tomar las medidas necesarias con el fin de afrontar con urgencia los retos en nuestro país y que lidere una nueva política de asilo en España y Europa que no dé la espalda a las personas refugiadas.
Tras los primeros pasos del Gobierno en relación a la embarcación ‘Aquarius’ y las declaraciones sobre la posible retirada de las concertinas, la entidad insta al Ejecutivo a asegurar el respeto de los derechos humanos en nuestras fronteras con medidas como la eliminación de las ‘devoluciones en caliente’, la puesta en marcha de vías seguras, adoptar un protocolo unificado ante las llegadas marítimas y hacer lo necesario para mejorar el sistema de asilo.
Según los datos de CEAR, a mediados del mes de mayo las solicitudes de asilo en España alcanzan las 17.000, con lo cual se podría superar el récord de peticiones del año pasado (31.120), al tiempo que recuerda que en 2017, el 65% de estas solicitudes fueron rechazadas, por lo que la tasa de reconocimiento se situó 10 puntos por debajo de la media europea.
“Además de celebrar la decisión de acoger a las personas rescatadas por el ‘Aquarius’, el Gobierno tiene que adoptar medidas que permitan afrontar este incremento de solicitudes de asilo y llegadas por mar a España”, destacó la secretaria general de la entidad, Estrella Galán durante la presentación del informe.
Trabas de la UE
“En un año en el que más de 3.100 personas perdían la vida tratando de llegar a Europa, la preocupación de muchos estados de la UE pareció centrarse en poner trabas a la labor de las ONG y mantener lo más lejos posible, aunque sea en condiciones de esclavitud, a quienes trataban de poner a salvo sus vidas”, lamentó Galán. Además, hechos como el sucedido recientemente con la embarcación ‘Aquarius’ confirman, según CEAR, esta política reducida a “cuanto más lejos, mejor”, algo que iría “en contra de todo lo que el proyecto europeo dice representar”.
Para evitar que situaciones como esta vuelvan a producirse, desde CEAR señalan la necesidad de un mecanismo de coordinación regional con corresponsabilidad de todos los Estados miembro para organizar los rescates, desembarcos y posterior reubicación. “Es el momento de dar un paso hacia un verdadero Sistema Europeo Común de Asilo”, destacó Galán, algo que para la entidad “por desgracia, está cada vez más lejos”.
"El año pasado las muertes se volvieron a contar por miles en el Mediterráneo, los gobiernos europeos, entre ellos el español, volvieron a ofrecer refugio a cuentagotas, y casi se diría que a regañadientes. Sin embargo, también en este informe se ofrecen ejemplos que muestran que la inclusión de personas refugiadas también es posible", afirman desde CEAR.