¿Cómo definirías ’28.000 por el clima’?
Es una guía integral para poner en marcha iniciativas que reduzcan emisiones de los centros educativos a través de diferentes programas, es una invitación a la acción, pero también cuenta con materiales más teóricos que generalmente no se asocian al cambio climático, materiales que hacen tomar conciencia de la huella hídrica, las migraciones por consecuencias del cambio climático o el tratamiento de la publicidad que incita a un consumo compulsivo y una sobreproducción consumiendo materias primas y con fábricas en constante producción y por lo tanto emitiendo gases de efecto invernadero.
La guía, además, va asociada a un calendario ecosocial para que cada día esté presente esta perspectiva y no solo cuando hay fenómenos meteorológicos adversos consecuencia del cambio climático que es cuando se habla más del tema.
¿Qué significa contar con el respaldo del Ministerio de Educación y el MITECO?
El apoyo que tenemos de estas dos instituciones es un respaldo simbólico. El Ministerio de Educación, Formación Profesional y Deportes nos ha ayudado en difusión permitiendo la presentación de la guía en su sede, y el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico acredita los diplomas del programa Recreos Residuo Cero, que no tienen más valor que el reconocimiento a una contribución a la sostenibilidad.
La educación en España está transferida a las comunidades autónomas, son ellas las que podrían dar difusión a la guía haciéndola llegar a todos los centros educativos de su competencia y reconocer la participación de los docentes en los diferentes programas con créditos o liberación horaria de coordinación. Pese a esto, el apoyo de los mencionados ministerios es fantástico porque son dos instituciones de gran valía en la temática que defendemos y las personas que integramos el colectivo estamos muy agradecidas.
¿Cómo podemos reducir el consumo de energía en nuestro centro educativo? ¿Es posible contar con un eco colegio?
Tenemos un programa de ecoauditoría que se puede llevar a cabo en tres momentos del curso escolar, al inicio del curso para evaluar la situación de partida, esta primera evaluación en sus parámetros nos da las ideas y puntos a mejorar. Tras tomar las medidas se puede volver a pasar la ecoauditoría en un segundo momento y al final de curso, eso permite ver si el consumo de energía ha descendido.
Hay muchos centros educativos que han implementado soluciones basadas en la naturaleza para reducir las temperaturas (todos vegetales, jardines verticales), otros han implantado placas solares como forma de obtención de la energía, o sistemas de refrigeración alternativos al aire acondicionado. Esto en sí mismo no supone ser eco si no se implementan otras soluciones o no se educa con perspectiva ecosocial. Quiero decir que puedes tener un coche eléctrico y pensar que eres ecológico y comprar ropa innecesaria a diario o ser una persona que buscar el constante conflicto o enfrentamiento en vez de la colaboración. Las acciones y la actitud van ligadas, eso es lo que implica la perspectiva ecosocial que defendemos desde Teachers For Future Spain.
"Puedes tener un coche eléctrico y pensar que eres ecológico y comprar ropa innecesaria a diario o ser una persona que buscar el constante conflicto o enfrentamiento en vez de la colaboración"
¿Qué medidas podemos implementar para fomentar el reciclaje y la reducción de residuos?
Si empezamos por la segunda parte de la pregunta es más fácil no tener que hacer la primera. Es decir, la primera R es la de "reducir". Si reducimos a cero los residuos no hay que preocuparse de reciclar. Uno de los programas que potenciamos es Recreos Residuos Cero que antes mencioné, consiste en que el alumnado lleve al centro educativo su almuerzo en envase retornable (tupper o similar), así potenciamos también una comida más sana como la fruta natural o los bocadillos frente a la bollería industrial o las galletas que emplean muchas veces personajes animados como cebo para potenciar el consumo infantil de estos productos ultraprocesados que además suponen una gran ingesta calórica.
Respecto al reciclaje, hay que pensar que si hemos llegado a esa R, probablemente hemos hecho algo mal, pero llegado ese punto el sistema de colores de clasificación de residuos lo pone fácil, el problema es que el porcentaje de reciclado en España todavía es inferior al 50% de los residuos y la gente ya no confía en ese sistema.
"Nosotros potenciamos los colecaminos, vías por las que el alumnado pueda desplazarse a los centros escolares de forma autónoma y sostenible"
¿De qué manera podemos promover una movilidad escolar más sostenible?
Otro de los programas que se potencia desde la guía son los colecaminos, vías por las que el alumnado pueda desplazarse a los centros escolares de forma autónoma y sostenible (a pie, en bici, etc), además está el transporte público que debe ser accesible (también económicamente) y eficiente.
No hace falta ser científico o científica para relacionar la densidad de vehículos, en su mayoría todavía con motor de combustión, con empeoramiento del aire que se respira. Esto va directamente asociado a la salud y eso debería ser ya la primera causa para motivarnos a desplazamientos sostenibles. Vemos familias que compran a sus hijos e hijas los mejores dispositivos móviles, pagan las mejores academias de idiomas, y dicen que quieren lo mejor para ellos pero no son conscientes de las afecciones de salud a la que los exponen o infravaloran el tema ambiental, esto no tiene otra causa que la desinformación social.
¿Qué acciones podemos tomar para aumentar la conciencia sobre el cambio climático entre estudiantes y personal?
La conciencia se toma desde el conocimiento. A veces, la información que llega es poco accesible en terminología para la sociedad en general, necesitamos que los medios de comunicación se impliquen más y se hable de esta problemática a diario, porque nos afecta a diario. También hay que ser conscientes de que individualmente se puede hacer mucho, pero hay que exigir también mediadas a quienes tienen mayor poder de ejecución como las instituciones políticas, pero pidiendo soluciones justas e informadas.
Al alumnado podemos darle información, fomentar la participación en los diferentes programas de la guía y, sobre todo, concienciarlos de que forman parte de la ciudadanía y cada persona forma sociedad, hay que decidir si se quiere una sociedad participativa y sostenible o individualista y negacionista.
"Hay que decidir si se quiere una sociedad participativa y sostenible o individualista y negacionista"
¿Cómo podemos involucrar a las familias y la comunidad en nuestras iniciativas ambientales?
Como docente organizar una charla a principio de curso dando información para suscitar su inquietud y participación en los programas y, a la vez, tendiendo la mano para educar conjuntamente dado que docentes y familias son parte de la comunidad educativa y debemos trabajar remando en la misma dirección.