El director de la Fundación Foro NESI, Diego Isabel La Moneda, dejó claro desde la inauguración del encuentro cuál es el camino a seguir para que nuestro país se convierta en referente en economía de impacto: “Es necesario avanzar hacia la descentralización económica y laboral, que el mundo urbano y rural se miren más para fomentar la igualdad de oportunidades, trabajar en red e impulsar la incidencia colaborativa para acelerar la transición justa, teniendo presente sobre todo a los jóvenes y al planeta”.
Con el foco puesto en la descentralización y la redistribución económica y territorial, los asistentes a esta edición de NESI Forum buscaron soluciones a los siguientes retos clave: lograr que España se convierta en referente en economía del impacto; impulsar ciudades más próximas, justas, humanas y sostenibles; facilitar el acceso a una alimentación universal y sostenible; fomentar la descentralización económica y laboral; crear nuevas narrativas sobre el concepto de 'éxito'; y promover la incidencia colaborativa para que los mensajes de economía de impacto lleguen a políticos, empresas, medios y sociedad.
Juan Marín: “España tiene los ingredientes necesarios para liderar la economía de impacto"
Juan Marín, presidente del Consejo Económico y Social de Andalucía, fue uno de los expertos participantes, quien destacó la importancia de la predisposición al diálogo. “España tiene los ingredientes necesarios para liderar la economía de impacto, pero para ello es necesario trabajar conjuntamente y fomentar el diálogo y el entendimiento entre las administraciones públicas y la sociedad civil”, señaló. Por su parte, Luis Miguel Jurado, vicepresidente de CEPES, resaltó que la economía social y el cooperativismo son aliados para el impulso de la economía de impacto ya que promueven la igualdad de oportunidades, representan el 10% del PIB y generan más de 2,3 millones de empleos en España.
Descentralización y sector primario
Paco Boya, secretario general del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, habló de la complejidad del desafío que supone la descentralización económica y laboral al ser un reto demográfico y democrático. “Tenemos que ser capaces de ofrecer igualdad de condiciones a quien decide vivir en el medio rural y a los que viven en las ciudades”, afirmó. Según sus palabras, hay pueblos que ya son un éxito de repoblación, en gran medida por la ingeniería social, que ha facilitado que personas que vivían en las ciudades vuelvan al pueblo, siendo una pasarela para la descentralización económica y laboral.
Paco Boya: “Tenemos que ser capaces de ofrecer igualdad de condiciones a quien decide vivir en el medio rural"
La actividad del sector primario sigue siendo prioritaria para asentar la población rural, por eso es fundamental apoyar a los productores agroecológicos, como indicó Natalia Valle, directora de Plant on Demand. “El uso de la tecnología facilita que los agricultores y ganaderos que integran la sostenibilidad en su producción accedan al mercado y a los consumidores, crear redes de acopio para planificar la demanda en base a la producción”, explicó. A su vez, Valle destacó la necesidad de que las administraciones impulsen marcos regulatorios que incentiven la compra de productos frescos y de cercanía para apoyar a los productores locales y agroecológicos.
Andalucía, referente en economía de impacto
Desde la Junta de Andalucía se están promoviendo políticas económicas y territoriales para mejorar la conectividad física entre las ciudades y los municipios, pero también se está mejorando la digitalización, que supera el 90%, y tiene el reto de llegar al 100% del territorio. Además, la Junta está impulsando el emprendimiento, el apoyo a la contratación de los jóvenes, el regreso del talento andaluz y el relevo generacional en el mundo rural.
Así explicó Antonia Jesús Ledesma, vicepresidenta tercera y diputada del Área de Ciudadanía y Equidad Territorial de la Diputación de Málaga, la situación de la comunidad autónoma respecto a la economía de impacto. Mientras, José Manuel Alba, secretario general de Economía de la Junta de Andalucía, abogó por crear una fiscalidad diferenciada para los pequeños municipios, que facilite la creación de empleo, y por dar oportunidades a los jóvenes y las mujeres, que son los que fijan la población.