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Motor Verde es una iniciativa de Fundación Repsol

Extremadura es la primera región en sumarse al mayor proyecto de reforestación en España

El proyecto de reforestación Motor Verde ya tiene a la primera comunidad autónoma participante: Extremadura. Esta iniciativa público-privada promueve la compensación voluntaria de emisiones con la plantación de árboles a gran escala por diferentes rincones de España. De esta manera, se generan beneficios para el medio ambiente, la sociedad y la economía.

El proyecto Motor Verde tiene un impacto medioambiental, social y económico
El proyecto Motor Verde tiene un impacto medioambiental, social y económico

Fundación Repsol, la Junta de Extremadura y el Grupo Sylvestris, junto a Banco Santander, Fundación Tierra Pura, Enagás e Ilunion, han puesto en marcha Motor Verde en esta comunidad autónoma. Esta iniciativa aspira a convertirse en el mayor proyecto de reforestación a gran escala para impulsar la compensación de emisiones en España.

Se trata de un proyecto diferencial, que persigue generar un triple impacto positivo. Por un lado, a nivel medioambiental, restaurando espacios naturales y contribuyendo a la acción contra el cambio climático. También busca una transformación social, creando empleo local e inclusivo. Además, la dimensión de este proyecto también es económica, apostando por una inversión verde de futuro y dinamizando el tejido empresarial en el ámbito rural.

El objetivo global de Motor Verde es reforestar hasta 70.000 hectáreas en España para impulsar la compensación de 16 millones de toneladas de CO₂. Este proyecto creará más de 15.000 oportunidades de empleo local e inclusivo en el entorno rural y se convierte en una ambiciosa apuesta por una economía social, verde y sostenible.

En Extremadura, concretamente, se van a reforestar 5.000 hectáreas de terrenos baldíos o afectados por incendios en diferentes municipios en los próximos tres años. La selección de tierras ha estado liderada por la Junta de Extremadura, en colaboración con los diferentes ayuntamientos y expertos forestales. Estos nuevos bosques absorberán de la atmosfera 1,3 millones de toneladas de CO₂. Esto permitirá a las empresas e instituciones que se unan a Motor Verde compensar sus emisiones de gases de efecto invernadero.

Los trabajos comenzarán este otoño en la sierra norte de Cáceres, con la plantación de cerca de un millón de árboles de especies autóctonas, conservando y mejorando la biodiversidad y garantizando su resiliencia a largo plazo. Para las plantaciones, se contratará a más de 1.000 trabajadores del entorno, de los que un 70% vendrá de colectivos vulnerables.

Además, en el marco del proyecto, se pondrán en marcha programas de formación y fomento de la innovación y el desarrollo tecnológico en el sector forestal. Asimismo, a través de la actividad de reforestación, se apoyará al tejido empresarial local en las zonas donde se lleven a cabo las plantaciones, dinamizando la economía rural extremeña y las actividades relacionadas con el turismo o el sector servicios.

Motor Verde está basado en un innovador modelo de colaboración público-privada para impulsar la recuperación económica y el desarrollo rural tras el impacto de la COVID-19 y está alineado con la estrategia de impulso social, ambiental y económico del Plan Extremadura 2030, la Agenda 2030 y el Pacto Verde Europeo, promoviendo una economía verde en el marco de la transición energética. El proyecto pretende, además, posicionar a España como un sumidero de carbono de calidad, competitivo y pionero en Europa.

El Director General de Fundación Repsol, António Calçada, señaló que “gracias al impulso de la Administración pública y las empresas colaboradoras, hemos logrado poner en marcha este ambicioso programa de reforestación para la compensación de emisiones, que aspira a ser el mayor de España”. Además, resaltó el triple impacto de Motor Verde: “económico, promoviendo una economía verde y sostenible; social, mediante la creación de empleo local e inclusivo; y medioambiental, generando nuevos bosques y ayudando a conservar los ya existentes”.

Los proyectos forestales estarán liderados por el Grupo Sylvestris, una empresa participada por Fundación Repsol que cuenta con más de 30 años de experiencia en el sector forestal. Los nuevos bosques se diseñarán de acuerdo con los estándares de la Oficina Española de Cambio Climático, el organismo oficial de certificación para proyectos de compensación en España, dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.

Está previsto que el proyecto se extienda próximamente a nuevas comunidades autónomas con la colaboración tanto de la Administración pública como de otras entidades y empresas privadas.

Además, recientemente, la Fundación Repsol ha firmado un acuerdo estratégico con KPMG para hacer crecer el volumen y la competitividad del mercado voluntario de compensación de emisiones de CO₂ en España.

La reforestación, una solución necesaria

Los árboles, a través de la fotosíntesis, absorben CO₂ y lo fijan en sus tejidos. Así, las reforestaciones representan una solución climática natural que ofrece opciones técnicamente contrastadas, atractivas y rentables para la captura de CO₂ de la atmósfera, generando beneficios medioambientales y sociales.

España cuenta con los espacios naturales necesarios y los profesionales para posicionarse como sumidero de carbono líder en Europa, dando respuesta al compromiso creciente de las empresas para compensar su huella.

Se estima que el mercado voluntario de emisiones de carbono podría multiplicarse por 15 en 2030 y por 100 en 2050. Y su valor podría alcanzar entre 5.000 y 30.000 millones de dólares, en función de los diferentes escenarios, según The Taskforce on Scaling Voluntary Carbon Markets.