La jornada ‘Emisiones de gases de efecto invernadero’, organizada por la Fundación Naturgy y el Capítulo Español del Club de Roma, puso el foco sobre la situación actual y el futuro de la descarbonización de la economía mundial.
En ella, Cristina Rivero, directora de Industria, Energía, Medio Ambiente y Clima en la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), y Luis Robles, socio de la consultora internacional de medioambiente Liken Carbon Hub, debatieron sobre algunas de las conclusiones que arroja el informe “Evolución de las emisiones de gases de efecto invernadero en España 2005-2020”.
Este documento, elaborado por Liken Carbon Hub y publicado por Fundación Naturgy, presenta algunos datos muy relevantes, como, por ejemplo, que las emisiones per cápita en España se han reducido en un 30%, con una población prácticamente estable, o que el sector de generación de electricidad ha reducido sus emisiones en casi un 70% durante los últimos 16 años.
Según la propia Rivero, “datos como estos muestran que hay una tendencia muy consolidada a separar la generación de riqueza de las emisiones de gases de efecto invernadero”.
Evolución de las emisiones de GEI
Los dos expertos repasaron la evolución de la economía española y sus emisiones de gases de efecto invernadero a lo largo de los últimos años, coincidiendo ambos en que las empresas son las únicas capaces de dar las soluciones que requieren los grandes retos de descarbonización.
“Para las empresas, la ESG dejó de ser una moda cuando el CO2 tuvo un impacto directo en su cuenta de resultados. En la actualidad nos encontramos en otro nivel en el debate sobre la sostenibilidad, dado que hay que estar alineados con los objetivos de los Acuerdos de París para poder acceder a los fondos europeos. Esto ha dado lugar a nuevas alianzas, lo que es muy enriquecedor para las compañías”, destacó la responsable de la CEOE.
Además, Cristina Rivero apuntó lo que necesitan las empresas para avanzar en su descarbonización: “estabilidad regulatoria y seguridad jurídica; apoyo para las inversiones necesarias; colaboración público-privada; e igualdad de condiciones con nuestros competidores de fuera de la Unión Europea”.
Por su parte, Robles afirmó que “las empresas de cierto tamaño encuentran una ventaja competitiva en la sostenibilidad, lo que hace que, a su vez, demanden servicios con un nivel de emisiones muy limitado. Esto se une a que los consumidores, cada vez más, quieren productos de bajo impacto ambiental”.
Asimismo, el socio de Liken Carbon Hub subrayó que “España es el segundo país europeo en superficie de bosques. Con este recurso natural, somos capaces de absorber el 14% de las emisiones brutas. Este porcentaje de compensación es un poco más de lo que emitieron los sectores industriales. Por tanto, tenemos que ser conscientes de la necesidad del cuidado y recuperación de los bosques y de poner la vista en los humedales. En definitiva, de proteger nuestro capital natural. Y en este punto dependemos de las Administraciones públicas”.
Acelerar la acción
Rivero también afirmó durante el encuentro que “en ocho años, tenemos que hacer un esfuerzo mucho más grande del que hemos hecho desde los Acuerdos de París. Pero este esfuerzo no va a depender solo de las voluntades de los gobiernos, sino que también lo hará del desarrollo tecnológico que acompañe este proceso”.
En este sentido, Luis Robles añadió que “al fin y al cabo, estamos en un sistema de mercado. Por tanto, las tecnologías que triunfarán serán las que consigan los objetivos de reducción al menor coste”.
El cierre de la sesión llegó de la mano de José Manuel Morán, vicepresidente del Capítulo Español del Club de Roma, quien afirmó que “los problemas que acarrea el cambio climático tienen que estar asociados a que seamos capaces de medir y, por eso, este informe es tan enriquecedor”. Además, Morán apuntó que “para salir de la situación en la que nos encontramos en lo relativo a las emisiones, tenemos que buscar la esperanza en la innovación y en la capacidad de los humanos para salir de situaciones complejas”.