La reforma del artículo 49 de la Constitución Española, aprobada el pasado mes de febrero, plantea un gran desafío: transformar a una sociedad acostumbrada a emplear términos que han definido durante mucho tiempo a las personas con discapacidad de manera peyorativa para adaptarse a una nueva narrativa que refleje la igualdad, la inclusión y el respeto.
Sin duda, esta reforma ha marcado un hito significativo en el camino hacia una sociedad más inclusiva y respetuosa con la diversidad. Este cambio legal, que sustituye el término ‘disminuido’ por ‘persona con discapacidad’, no sólo implica una modificación lingüística, sino que también representa un cambio de mentalidad y una oportunidad para promover una narrativa más inclusiva en todos los ámbitos de la sociedad.
Con el fin de promover la conciencia sobre esta nueva realidad y de analizar su incidencia en los medios de comunicación, Fundación Juan XXIII celebró este miércoles la mesa redonda ‘De “disminuido” a “persona con discapacidad”: El impacto de la reforma del artículo 49 de la CE en los medios de comunicación’.
El evento, que tuvo lugar en la sede de la Fundación (Vicálvaro, Madrid), contó con la participación de Mayte Antona, redactora jefa de Sociedad de Servimedia; Pedro Fernández, redactor jefe de Soziable; Marcos González, fundador y presidente editor de Corresponsables; y Melisa Tuya, redactora jefa de 20 Minutos y coordinadora de Capaces. Nuria Prieto, responsable de Comunicación de Fundación Juan XXIII fue la encargada de moderar el debate.
Más allá de la terminología
“Jugamos un papel muy importante. En cuanto a cambiar ‘disminuido’ por ‘persona con discapacidad’, no debemos caer sólo en la terminología, que es importante, sino que el principal avance es todo lo que hay detrás: la forma que tenemos de comunicarnos, de empatizar… La diversidad es que te inviten a una fiesta y la inclusión es que te saquen a bailar. Ésta es la idea de cambiar la terminología; que al final sea para que a todos nos saquen a bailar”, afirmó Pedro Fernández.
En la jornada, los distintos ponentes pusieron en valor la importancia de su labor como profesionales de la comunicación para la divulgación y sensibilización de esta temática, siendo responsables de transmitir un mensaje que promueva el respeto, la igualdad y la inclusión de las personas con discapacidad.
“Como medios, tenemos la responsabilidad de dar a conocer las historias de las personas con discapacidad de una forma creíble para que se normalice hablar de ello no sólo en la sección de sociedad, sino ir más allá, de forma transversal en otras secciones como economía, deportes, en cualquier sección de diarios o televisión. ¿Por qué no puede empezar un informativo con una reforma como ésta? Debería ser una noticia principal”, señaló Marcos González.
Por su parte, Mayte Antona añadió que “si no cuentas las cosas, no existen y, si no existen, no se habla de ellas. Hay que hacer un cambio de perspectiva en la información sobre discapacidad que no sea sólo el yin y el yang: el súper héroe o el desgraciado. Porque hay muchas historias por contar, por investigar. Hay un campo muy difícil por el que deben emprender muchos medios, sobre todo los generalistas, que tienen muy dosificada la información sobre la discapacidad”.
Y, por último, Melisa Tuya declaró que “el objetivo de los medios debería ser normalizar la discapacidad. Hay que entender que, sobre todo, las personas con discapacidad son personas. Hablamos de la discapacidad como una cosa única cuando es un tema complejísimo que está tan lleno de realidades no como tipos de discapacidad, sino como personas”.