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Mario Vargas Llosa comparte una mañana con 200 internos de la prisión de Valdemoro en el Aula de Cultura de Solidarios

En la cárcel con un premio Nobel de Literatura

El premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa ha participado en el Aula de Cultura de Solidarios en la cárcel de Madrid III (Valdemoro). Acompañado por un grupo de voluntarios de esta ONG, el escritor habló ante 200 internos sobre su vocación literaria y del oficio de escritor, compartiendo preguntas y anécdotas de su vida con los asistentes. El escritor ha donado a la biblioteca del centro penitenciario 50 títulos de sus diferentes obras en nueve idiomas.

Vargas Llosa durante su ponencia en la prisión. Junto a él el presidente de Solidarios, Cristóbal Sánchez Blesa.

La iniciativa surgió cuando hace unas semanas la oficina del escritor en España contactó con Solidarios con la intención de donar una cantidad de libros a prisiones. Esta ONG, que desde hace 30 años mantiene aulas de cultura en numerosos centros penitenciarios del país, aprovechó para invitarle a participar y a entregar personalmente la donación en el centro penitenciario. Los 50 títulos donados incluyen sus grandes obras en diferentes idiomas: castellano, búlgaro, rumano, húngaro, portugués, polaco, ruso, albanés y serbio.

Con una ponencia titulada 'La literatura y la vida', Mario Vargas Llosa compartió la mañana de sábado con más de 200 internos de la cárcel de Valdemoro. Invitado por Solidarios, el escritor acudió "con ganas y curiosidad" por compartir un espacio que nunca antes había conocido en España. El escritor comenzó su charla explicando las ventajas que las buenas lecturas ofrecen para la vida de las personas: “La lectura nos saca de nuestro pequeño mundo y nos enseña otros espacios donde poder comprobar que los seres humanos tenemos más cosas comunes que diferentes”. Para el escritor, “leer buenos libros tiene efectos sobre nuestra visión del mundo, nos permite vivir más vidas dentro de la vida”.

“¿Cómo resulté siendo escritor? Por el extraordinario placer que me dieron los libros desde que a los cinco años aprendí a leer”

Desde su propia historia, Mario Vargas Llosa compartió con los internos de la cárcel de Valdemoro el origen de su dedicación a la literatura: “¿Cómo resulté siendo escritor? Por el extraordinario placer que me dieron los libros desde que a los cinco años aprendí a leer”. Poco a poco fue desgranando la historia de su vocación literaria y cómo los pasos de su biografía le han ido dando ideas para sus siguientes obras.

“Una novela, en mi caso, siempre nace de una experiencia vivida, de imágenes que se han conservado en mi memoria y son el embrión de una historia”. Así, contó cómo se han forjado varias de sus obras. De su estancia en el colegio militar nació su primera novela, 'La ciudad y los perros'; de su viaje a la selva peruana varios trabajos posteriores como 'La casa verde' o 'Pantaleón y las visitadoras'; de sus vivencias en la época de las dictaduras en Perú nació 'Conversaciones en la Catedral'.

El Nobel junto a los voluntarios de Solidarios.

En el turno de preguntas los internos, muy participativos ante la presencia del Nobel de Literatura en la cárcel, preguntaron por su relación con las editoriales en los inicios de su carrera, por alguna obra en particular como 'La fiesta del Chivo', por sus ideas políticas liberales, sobre lo más difícil de haber recibido el Premio Nobel, etc. Tras el coloquio muchos se acercaron a solicitar la firma del escritor en algunos libros y cuadernos con los que habían acudido al salón de actos.

Una mañana de febrero que los internos tardarán en olvidar porque la compartieron con con Mario Vargas Llosa, miembro de la Real Academia Española de la Lengua, Premio Nobel de Literatura en 2010, Premio Cervantes en 1994 y Premio Príncipe de Asturias de las Letras en 1986.

Por organizar actividades como esta, Solidarios ha recibido el Premio Nacional del Fomento de la Lectura otorgado por el Ministerio de Cultura en 2017 por “su extraordinaria labor en la difusión de la lectura entre la población reclusa y su capacidad para hacer del libro una herramienta para la reinserción” en las Aulas de Cultura, tal y como se expresó en el fallo del jurado.

El objetivo de estas aulas de Solidarios es utilizar la cultura como vehículo de reinserción

Las Aulas de Cultura de Solidarios se desarrollan cada semana en siete centros penitenciarios en todo el país (Soto del Real, Valdemoro, Navalcarnero, Alcalá-Meco, Sevilla, Murcia y Granada) gracias a unos 70 voluntarios. El objetivo es utilizar la cultura como vehículo para la reinserción y la resocialización mediante el trato con las personas voluntarias y los invitados que traen los temas de actualidad dentro de los muros de prisión.

Al salir de prisión Mario Vargas Llosa comentó que “la experiencia ha sido muy positiva, muy interesante, he aprendido muchas cosas. El trabajo de Solidarios para mantener a quienes están aquí en contacto con la cultura es magnífico”.

Como comentaba un voluntario al salir, quién sabe si no será esta experiencia uno de esos momentos vividos que son germen de una nueva novela.