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Informe PISA 2022

El rendimiento académico de los estudiantes de secundaria de la OCDE marca una fuerte tendencia descendente

La edición 2022 del Informe PISA revela un preocupante descenso del rendimiento académico de los estudiantes de secundaria en las materias de matemáticas y lectura con respecto a la edición 2018. Este estudio trienal, coordinado por la OCDE, evalúa el desempeño del alumnado de 15-16 años de 80 países y los datos en España reflejan la misma tendencia, aunque con una caída es más suave que en otros lugares.

PISA ha evaluado el desempeño de 690.000 estudiantes en 80 países de la OCDE.
PISA ha evaluado el desempeño de 690.000 estudiantes en 80 países de la OCDE.

El Programa para la Evaluación Internacional de los Estudiantes (PISA, en sus siglas en inglés), coordinado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), evalúa el rendimiento académico del alumnado de 15-16 años de 80 países. Para su edición 2022, se realizaron las evaluaciones a unos 690.000 estudiantes, casi 31.000 de ellos españoles de 4º curso de la ESO (Educación Secundaria Obligatoria).

En general, los resultados no reflejan grandes cambios en el promedio de la OCDE en las evaluaciones consecutivas de PISA durante las dos últimas décadas. Sin embargo, en PISA 2022 el promedio cayó casi 15 puntos en matemáticas y alrededor de 10 puntos en lectura en comparación con PISA 2018. Se salva un poco, el rendimiento medio en ciencias, que se mantuvo. Las caídas sin precedentes en matemáticas y lectura apuntan a los efectos provocados por la pandemia de COVID-19 en la mayoría de los países.

Sólo cuatro países mejoraron su desempeño en matemáticas, lectura y ciencia: Brunei Darussalam, Camboya, República Dominicana y Taipei Chino. De todas maneras, el análisis de tendencias de los resultados de PISA revela un declive de décadas que comenzó mucho antes de la pandemia.

En lectura y ciencias, los resultados alcanzaron su punto máximo en 2012 y 2009, respectivamente, antes de descender, mientras que el rendimiento en matemáticas comenzó a descender antes de 2018 en Australia, Bélgica, Canadá, Corea, Finlandia, Hungría, Islandia, Países Bajos, Nueva Zelandia, República Eslovaca y Suiza.

Los datos del informe reflejan un fuerte descenso generalizado en el desempeño en matemáticas y lectura.

Cuatro países y economías están resistiendo esta tendencia de declive a largo plazo: Colombia, Macao (China), Perú y Qatar. Sus resultados han mejorado en promedio en las tres materias durante todo el período en que han participado en PISA. Otros cuatro países (Israel, República de Moldova, Singapur y Turquía) han mejorado en dos de las tres asignaturas.

En lo que respecta a España, el informe muestra una caída más suave que en otros lugares, pero traza igualmente una clara tendencia a la baja a lo largo de la última década. Los resultados son 473 puntos en matemáticas, ocho puntos menos que en edición de 2018; repunta levemente en ciencias al pasar de 483 a 485; y en lectura alcanza los 474 puntos, una materia que registra un desplome de catorce puntos con respecto a 2012.

Además, la OCDE destaca que en el período 2012-2022 aumentó la proporción de estudiantes de 15 años con calificaciones inferiores en las tres materias, mientras que el porcentaje de alumnado de alto rendimiento disminuyó en matemáticas. Precisamente, en esta última materia, España, con 473 puntos, se sitúa muy lejos de los 536 de Japón, pero está en la media de la OCDE (472) y de la Unión Europea (474), y se encuentra en el mismo grupo de países como Lituania, Alemania, Francia, Hungría, Portugal, Italia, Noruega y Estados Unidos.

Tendencias en desigualdades educativas

Además de la evaluación del alumnado, los informes PISA miden otros parámetros con el objetivo de dilucidar las posibles desigualdades en cuanto al acceso a la educación en los diferentes países y economías. En este sentido, la presente edición revela que los sistemas educativos de Canadá, Dinamarca, Corea, Finlandia, Hong Kong (China), Irlanda, Japón, Corea, Letonia, Macao (China) y el Reino Unido son muy equitativos según el estándar de PISA.

El porcentaje de jóvenes de 15 años matriculados en la escuela en el 7º grado o superior en cada país oscila entre el 36% en Camboya y el 48% en Guatemala y el 90% o más en 34 países y economías. Además, los estudiantes con ventajas socioeconómicas obtuvieron 93 puntos más en matemáticas que los estudiantes desfavorecidos en promedio en los países de la OCDE. La brecha de rendimiento atribuida al nivel socioeconómico de los estudiantes es superior a 93 puntos en 22 países o economías y de 50 puntos o menos en 13 países o economías.

Los niños superaron a las niñas en matemáticas por nueve puntos y las niñas superaron a los niños en lectura por 24 puntos. En ciencias, la diferencia de rendimiento entre niños y niñas no es significativa.

Los estudiantes no inmigrantes obtuvieron 29 puntos más que los estudiantes inmigrantes en matemáticas, pero los estudiantes no inmigrantes obtuvieron solo cinco puntos más que los estudiantes inmigrantes una vez que se tuvo en cuenta el estatus socioeconómico y el idioma hablado en el hogar.

Por otro lado, un promedio del 8% de los estudiantes informaron que no comieron al menos una vez a la semana en los últimos 30 días porque no había suficiente dinero para comprar alimentos. En 18 países, más del 20% de los estudiantes informaron que no podían permitirse comer al menos una vez a la semana.

La brecha socioeconómica en el desempeño en matemáticas no cambió entre 2018 y 2022 en 51 de los 68 países; se amplió en 12 países y se redujo en cinco (Arabia Saudita, Argentina, Chile, Emiratos Árabes Unidos y Filipinas). En lo que respecta a la brecha de género en el rendimiento en la misma asignatura, tampoco cambió entre 2018 y 2022 en la mayoría de los países (57 de los 72 con datos comparables); se amplió en 11 países y se redujo en cuatro (Albania, Bakú, Colombia y Montenegro).